El Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada de Chile (SHOA) informó que a las 16:28 horas de este jueves 4 de marzo, ocurrió un sismo de magnitud 8,1 en la Cuenca del Pacifico, con epicentro a 1.169 kilómetros al Noreste de Auckland, Nueva Zelanda. Cabe señalar, que esta información fue corroborada por el Pacific Tsunami Warning Center (PTWC).
Conforme al protocolo ONEMI – SHOA vigente, se declaró Estado de Precaución del borde costero nacional, incluyendo territorio insular, ONEMI declara Alerta Amarilla para las comunas del borde costero nacional, incluyendo territorio insular, por amenaza de tsunami, vigente a contar de hoy y hasta que las condiciones así lo ameriten.
La alerta busca poner en servicio los equipos de emergencia para enfrentar una eventual ola de entre 40 cm. a 1 metro como máximo para las costas chilenas, según el reporte entregado por el SHOA.
La estimación es que se trataría de una especie de corriente intensa que se manifestaría con mayor precisión en las zonas de bahías, estuarios, y desembocaduras de ríos.
El horario de arribo de la ola será a las 4.55 a las costas de Cobquecura, Trehuaco y Coelemu.
Por su parte, el Capitán de Puerto de Lirquén, capitán de corbeta Jacob Silva, hizo un llamado a la comunidad a la precaución, especialmente a mantenerse alejado del borde costero en a lo menos 80 metros.
Onemi recomienda
Se deberán establecer todos los cursos de acción necesarios para el resguardo de la población en zona de seguridad, mientras se mantenga el estado determinado por SHOA. Asimismo, se deberá mantener una coordinación constante con cada uno de los Ministerios, que permita determinar los impactos, daños y sectores vulnerables producto de esta emergencia.
Se recomienda a la población:
Mantenerse informado a través de las autoridades.
Los municipios deberán coordinar la evacuación necesaria de los sectores vulnerables, que pudiese ser afectados.
Las Direcciones Regionales de ONEMI deberán adoptar todas las medidas pertinentes para evitar y disminuir el impacto sobre la población, de acuerdo a la planificación específica para este evento.
Se deberá advertir a la población, a través de sensibilización y orientación comunitaria a no exponerse innecesariamente a situaciones de riesgo, invitando a mantener siempre una actitud de precaución, debido a la condición presente, respetando las recomendaciones entregadas por las Autoridades.
Los municipios e integrantes del Sistema de Protección Civil, deberán evaluar y monitorear permanentemente las condiciones de vulnerabilidad, adoptando todas las medidas pertinentes para evitar y disminuir el impacto sobre la población, activar los respectivos Comités de Operaciones de Emergencia y establecer todas las coordinaciones previstas en la planificación específica para estos casos.