La Fiscalía Local de Chillán investiga las muertes de un carabinero y de un adolescente, quienes fallecieron en el marco de un procedimiento policial registrado esta madrugada en el sector sur de la capital de la Región de Ñuble.
El Ministerio Público instruyó diligencias a la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones.
El funcionario policial fallecido es el carabinero Brent Rivas Manríquez, de 23 años, y con 2 años y 10 meses de servicio en la institución; mientras que el otro fallecido es J.P.A.M.M, de 16 años, y quien registraba investigaciones vigentes por la Ley de Drogas, atentado contra la autoridad y receptación.
El fiscal jefe de Chillán, Sergio Pérez Nova, explicó que pasadas las 1 de la madrugada vecinos llamaron a Carabineros, denunciando el temor a ser víctimas de robos a sus viviendas, debido la presencia de un automóvil con sus vidrios polarizados que circulaba por el sector.
Según los antecedentes recopilados hasta ahora, una patrulla, que integraba un suboficial, una sargento segundo y el carabinero fallecido , fiscalizó a un vehículo con las características señaladas por los vecinos, el que estaba estacionado en un pasaje.
Uno de los funcionarios se aproximó al vehículo por el lado del chofer y los otros dos, por el costado del copiloto y verificaron que, al menos, habían dos personas adentro.
Los carabineros les pidieron descender para realizarles un control de identidad y una vez afuera, cuando estaban siendo fiscalizados, el conductor se dio a la fuga en dirección a una pandereta, con la intención de saltarla. El carabinero Brent Rivas lo siguió, pero su accionar fue frenado por dos impactos de bala que recibió por la espalda y que fueron disparados por un tercer sujeto que apareció en el lugar.
Este último es el otro fallecido, el adolescente J.P.A.M.M, quien fue abatido por el suboficial a cargo de la patrulla al ver que le estaban disparando a su compañero.
El fiscal Sergio Pérez afirmó que habiendo revisado los peritajes que realizó la PDI en el sitio del suceso y el trabajo en el lugar de la fiscal (s) Claudia Espinoza, “entendemos que se da la dinámica de la legítima defensa de un tercero, es decir, que el suboficial usó su arma de servicio para repeler la agresión que recibía otro carabinero”, precisó.
Acotó que el adolescente falleció de inmediato, manteniendo el arma empuñada y con una bala pasada en su pistola 9 mm, con la que disparó en tres oportunidades, según los peritajes realizados al arma de fuego. El carabinero, en tanto, murió en el Hospital Herminda Martin de Chillán, cuando lo estaban operando.
En el mismo momento en que huyó el conductor del vehículo, lo que logró finalmente, el copiloto también salió corriendo y tras él, la sargento segundo que logró darle alcance a unos pocos metros. En el camino, el imputado, identificado como F.A.Z.E, también de 16 años, lanzó una bolsa que resultó contener 75 gramos de marihuana.
“En la dinámica misma de la legítima defensa y del fallecimiento, él no tiene interacción, porque estaba a unos metros distantes”, dijo el fiscal Pérez.
Este imputado adolescente tenía tres órdenes de detención, una por receptación y dos por microtráfico de drogas. Precisamente por este delito fue formalizado este mediodía. La Fiscalía pidió al Juzgado de Garantía de Chillán su arresto domiciliario total, pero el tribunal lo dejó sólo con arraigo nacional y bajo la sujeción de un programa de vigilancia.
En otra causa de microtráfico de drogas, eso sí fue condenado, en la misma audiencia, a 61 días de libertad asistida, se le preparó un juicio simplificado por otro delito de la Ley de Drogas y se le reformalizó por una receptación de vehículo motorizado.