La fiscal a cargo de causas de violencia institucional derivadas del estallido social en Ñuble, Tamara Cuello Peña, informó que a 300 días de presidio fue condenado, por apremios ilegítimos, Francisco Paredes Navarrete, quien mientras cumplía funciones como carabinero de la Segunda Comisaría de Chillán participó en el control de una protesta, donde lanzó gas pimienta a los ojos a una manifestante.
Según expuso la Fiscalía, en un juicio abreviado ante el Juzgado de Garantía de Chillán, “el día 21 de noviembre de 2019, en horas de la tarde, aproximadamente a las 20:37 horas, en la intersección de las calle Libertad con 18 de Septiembre de la ciudad de Chillán, mientras se realizaba una manifestación social, el acusado se encontraba realizando sus funciones junto a otros funcionarios de Carabineros, avanzando en un piquete con escudos protectores y al llegar junto a la víctima, para que se retirara del lugar, roció hacia sus ojos, a corta distancia, un aerosol portátil que contenía una sustancia irritante, denominada gas pimienta, causando con ello lesiones consistentes en herida conjuntiva por químico, dermatitis de contacto por irritantes y trastorno del globo ocular, lesiones de carácter leve, para luego el acusado, continuar al interior del piquete, sin auxiliar a la víctima”.
La fiscal Tamara Cuello afirmó que esta es la primera condena en Ñuble “para aquellos hechos en que funcionarios de Carabineros, dentro del contexto del estallido social, cometieron delitos, especialmente apremios ilegítimos”.
Para el cumplimiento de su pena, el tribunal le otorgó al imputado el beneficio de la remisión condicional. Además, se le condenó a la prohibición de ejercer cargos u oficios públicos.