Los testigos de Jehová, conocidos en Chile por muchas décadas por su obra de predicación pública, volvieron a las calles el pasado sábado 18 de junio para reanudar su actividad pública.
Los testigos de Jehová habían suspendido su obra de predicar públicamente en marzo de 2020 debido a la pandemia del COVID-19 aun antes de que las autoridades del país dieran instrucciones con respecto a las actividades religiosas.
Por todo el mundo se reanudarán este mes de junio algunas facetas de su ministerio público, con excepción de la predicación de casa en casa, que se mantiene suspendida.
De ahora en adelante, los puede encontrar otra vez en lugares de gran afluencia con los conocidos exhibidores de publicaciones bíblicas gratuitas y también en las calles.
También se han reanudado las visitas regulares a las cárceles. “Con frecuencia los testigos de Jehová de la Región de Ñuble, están con los
exhibidores dispuestos en variados puntos de las comunas de nuestra región, para distribuir publicaciones bíblicas gratuitas a quienes las pidan” dijo Sergio Herrera vocero local de los testigos de Jehová.
En cualquier circunstancia, aunque la ley no lo requiera, los testigos de Jehová usarán mascarilla cuando realicen esta obra voluntaria como medida de precaución tanto por la salud de ellos como por la de los demás.
Durante estos más de dos años, los testigos de Jehová no han estado inactivos. Al contrario, se han contactado con otras personas mediante cartas, teléfono y otros métodos virtuales.
Las reuniones religiosas también se han mantenido mediante videoconferencia durante estos dos años sin interrupción. En abril de este año se reanudaron en un formato híbrido (presencial y a través de videoconferencia de manera simultánea).
Hay más de 89 mil testigos de Jehová en Chile, repartidos en más de 950 congregaciones (grupos organizados). En la región de Ñuble existen 25
congregaciones y 1968 predicadores. El primer testigo de Jehová llegó al territorio nacional en 1924 y se encuentra enrolada legalmente desde el año 1960.