El equipo de la Seremi de Educación, encabezado por el profesor César Riquelme Alarcón, realizó la primera capacitación denominada Habilidades Comunicativas para la Mejora de los Establecimientos Rurales de la región de Ñuble, respondiendo a la presencia de escuelas multigrado que cuentan con pocos docentes, o incluso uno solo, que atienden las características y necesidades individuales de alumnos con distintas edades y niveles de conocimiento.
Bajo este diagnóstico y caracterización de la educación rural multigrado, la Seremi de Educación tomó la iniciativa de adecuar y articular las diferentes actividades y temáticas de las enseñanzas aprendizaje en un entorno significativo y pertinente a los lideres y lideresas de centros educativos rurales de nuestra región. Capacitaciones que permiten fortalecer el rol y liderazgo de los coordinadores de microcentros rurales por medio de desarrollo de habilidades comunicativas y estratégicas, favoreciendo el trabajo colaborativo, orgánico y sistemático de las comunidades educativas con foco hacia mejora educativa.
El Seremi de Educación, profesor César Riquelme valoró la instancia, destacando el trabajo por la valoración de la Educación Rural, “nos encontramos en la Universidad de Concepción, en el campus Chillán, en un hermoso encuentro de profesores rurales, pero no de cualquier profesor rural, profesores rurales de escuelas unidocentes y bidocentes, de las cuales hay más de 100 en nuestra región de Ñuble. Estos Establecimientos Educacionales se encuentran absolutamente vitales, vigentes y que cumplen una labor enormemente profunda, en aspectos sociales comunitarios, de mantención y de tradiciones y, por supuesto, de educación en valores de nuestros niños y niñas.
Para Sara Aguayo, profesora de la escuela Villa Denecán, en Trehuaco, uno de los grandes valores del encuentro fue la posibilidad de reunir equipos de las escuelas, “aquí tenemos profesores itinerantes, que dictan clases de inglés y física. El equipo interno de la escuela, que se reúne y explora habilidades de liderazgo para motivar al personal y mejorar el aprendizaje de los estudiantes.
Patricio Gutiérrez, unidocente del sector Los Queñes, Coihueco, destacó el papel de las escuelas en la vitalidad de la zona rural, “para mantener vigente la labor educacional que hace un profesor en un ambiente rural, mantenerlo activo, mantener la idiosincrasia del local. Siempre perfeccionados y visibles a la sociedad, porque la educación rural estaba un poco invisibilizada, ahora ya se sabe que la base de transformación en una comunidad. Para que la comunidad local progrese tiene que haber una escuela activa, para que los niños aprendan no solamente a leer y escribir, sino que valorar su entorno y hacerlos surgir en un país que después les retribuya la posibilidad de volver allá”.