En la caleta rinconada de Taucú se desarrolló un acto cultural que tenia como objetivo crear conciencia y aunar esfuerzos para revertir la normativa que autoriza el ingreso de barcos pesqueros a la primera milla marina que era zona exclusiva para la pesca artesanal.
La convocatoria hecha por el municipio de Cobquecura, junto a la ONG contó con la participación del Gobernador de Ñuble Oscar Crisóstomo y la diputada Marta Bravo, además de decenas de pescadores artesanales de la zona y vecinos de la comuna.
El alcalde Julio Fuentes Alarcón recordó que “no es primera vez que damos esta lucha para proteger nuestro mar. Hace muchos años fuimos la única comuna que se mantuvo en oposición a la empresa Celulosa Nueva Aldea, que sigue vertiendo sus riles al mar. Y hace un par de años lideramos la lucha para impedir que se instalaran jaulas flotantes de las empresas salmoneras, lo que afortunadamente gracias al esfuerzo y trabajo conjunto y unido logramos vencer esa iniciativa malévola. Hoy nos encontramos frente a otra injusticia avasalladora que de una u otra forma no solo está perjudicando el derecho de nuestros pescadores artesanales sino que va mucho más allá con esta ley de pesca que existe en nuestro país que favorece que la primera milla le corresponde por derecho propio a la pesca artesanal. Pero hace 5 años atrás se promulga una resolución, que da paso a que esa milla también pueda ser intervenida por embarcaciones de mayor tamaño. Y lo peor es que se dicta en marzo de este año una nueva resolución, la 919; que fue renovada automáticamente sin consulta ni argumento técnico, que permite que durante los próximos 5 años sigan operando en nuestro en nuestro territorio embarcaciones que eran de hasta 12 metros de eslora, pero ahora incluso pueden ser de hasta 15 metros”.
El jefe comunal aseveró que “para ellos son artesanales, pero para nosotros por supuesto son embarcaciones semi industriales, que prácticamente que arrasan con todo lo que está en estas zonas. Nosotros queremos cuidar y preservar el santuario de la Naturaleza La Lobería, que fue declarado lugar protegido en 1992, cuya colonia original era más de 6000 o 7000 lobos y que de acuerdo a los censos de las últimos años ya vamos en 4000 ejemplares, con una zona protegida de solo 4 kilómetros y de 500 metros mar adentro. Esa área es penetrada por los barcos pesqueros que vienen del Biobío, aprovechando que cuando nos separamos y se creó la región de Ñuble se exigió mantener compartido el mar, lo que les permite venir a esas flotas gigantes a arrasar con todo a nuestras costas sin cuidar ni siquiera la zona protegida. Por eso agradecemos la presencia del Gobernador regional de Ñuble que ha estado luchando con nosotros, ya que este es un tema región, donde Cobquecura tiene la mayor capacidad de territorio con 52 km de costa, lo que significa el 95% de la costa de la región de Ñuble; y por eso necesitamos el apoyo transversal para proteger nuestra avifauna y nuestros recursos, donde incluso ya tenemos aprobado un proyecto que va a a potenciar el turismo en nuestra caleta rinconada de Taucú con nuevas instalaciones, una costanera y un paseo, ya que queremos dejar como legado a las futuras generaciones u mar limpio y sustentable».
Recurso de protección
Asimismo, recordó que junto a otras organizaciones y el Sindicato de pescadores artesanales, el municipio presentó en la Corte de Apelaciones de Valparaíso un recurso de protección, que fue acogido y cuyo dictamen establecía que debía ponerse término a estas labores, pero esto fue desconocido por el Consejo de Defensa del Estado y la Subsecretaría de pesca y acuicultura que apelaron a la Corte Suprema; y ahora el tema está en manos de ese tribunal.
«Nosotros no decimos que no vengan a pescar pero sí exigimos que se respeten las leyes de acuerdo a lo que están establecidas, y que pesquen donde tienen los permisos, para que dejen a Cobquecura y sus pescadores y a nuestra gente que vive y sobrevive del turismo, poder seguir progresando en paz, Como municipio seguiremos trabajando para terminar con estos abusos y hago un llamado a la comunidad regional de Ñuble a que nos ayuden a luchar y proteger nuestras costas para que las futuras generaciones también puedan disfrutar de estas maravillas que dios nos heredó”, concluyó el alcalde.