Dos situaciones de riesgo debió atender el servicio de urgencia del Hospital de Quirihue durante la noche de Año Nuevo.
El primero de ellos se trató de un choque de dos automóviles, ocurrido cerca de la medianoche en la intersección de Avenida Prat con Juan Antonio González. El accidente no dejó lesionados de gravedad, pero sí provocó daños a dos postes del alumbrado público y por consiguiente los vecinos de la zona norte de la ciudad quedaron sin energía eléctrica.
Así lo indicó la doctora Paula Quezada, encargada de turno en la urgencia del centro asistencial, agregando además que se atendieron a pacientes que llegaron a requerir atención médica debido al exceso de consumo de alcohol.
La doctora Quezada hizo un llamado a la responsabilidad durante las celebraciones, no solo de fin de año sino cualquiera donde haya consumo de alcohol de por medio. «Es importante consumir alcohol con moderación y evitar conducir bajo la influencia del alcohol», señaló.