Desde la madrugada de este viernes 28 se pronostican importantes lluvias para la zona centro sur de Chile, señaló el experto en agroclimatología de INIA Quilamapu, Raúl Orrego, quien agregó que estas alcanzarían su máxima intensidad en torno al mediodía
del viernes.
El investigador sostuvo que el frente estará acompañado de vientos y tormentas eléctricas, además de nevazones en las zonas cordilleranas de la zona centro sur. “Las lluvias deberían extenderse hasta el lunes 1 de mayo, y afectarán también la zona central del país”, añadiendo que durante los tres días “debieran precipitar en torno a los 50 mm en Ñuble y los 60 mm en Biobío, según lo que indica el modelo de circulación ICON de la plataforma Ventusky”.
Orrego aclaró que estas precipitaciones no están relacionadas directamente con el inminente arribo del Fenómeno del Niño, que debiera de ocurrir en los primeros meses de invierno, aunque “sí se observa mayor temperatura del mar en la costa, lo que favorece la inestabilidad de la atmósfera y, por tanto, la eventual ocurrencia de tormentas eléctricas y temporales”.
Respecto de la implicancia que tendrán las precipitaciones, el especialista indicó que estas ayudarán a palear el importante déficit de agua que tenemos en la zona, que es mayor al 80 % respecto de lo que se acumula históricamente en la zona, y que se vio agravado por las altas temperaturas que caracterizaron el verano.
Finalmente el investigador de INIA Quilamapu expresó que “las lluvias esperadas son una buena señal, aunque pueden retrasar la realización de algunas labores agrícolas, como las siembras invernales”. Sin perjuicio de lo anterior, recalcó que “estas lluvias no son indicativas que el año 2023 será particularmente lluvioso, aunque el pronóstico de la entrada a una fase Niño desde el comienzo del invierno es un buen augurio a este respecto”.