Según datos del Registro Civil de Identificación, en Chile se otorgan anualmente cerca de 20 mil licencias de conducir Clase B a adolescentes entre 17 y 18 años, quienes se encuentran precisamente en el rango de “los más propensos a sufrir accidentes viales”. De hecho, de acuerdo a cifras de Conaset, 47 conductores jóvenes, entre 17 y 20 , perdieron la vida en un accidente de tránsito durante 2023, representando un 6% del total de fallecidos.
Otro dato impactante es la presencia de menores entre 7 y 14 años como conductores fallecidos en los últimos cinco años. Desde 2018, nueve infantes protagonizaron accidentes viales con resultado de muerte. Factor que aumenta la necesidad de intervenir a temprana edad en este segmento que de acuerdo a la información proporcionada por la autoridad ya cuenta con un acercamiento a la conducción.
En un esfuerzo por abordar esta creciente problemática, la Asociación Pro Consumo Responsable de Bebidas Espirituosas (Aprocor), junto a la Municipalidad de Vitacura anunciaron el lanzamiento del Programa “Conductores del Futuro, #ConductoresNiUnaGota” enfocado en una intervención escolar que impactará a más de 600 alumnos de cuarto medio de la comuna.
La iniciativa tiene como objetivo educar y sensibilizar de manera temprana a los alumnos que están a punto de terminar su etapa escolar de diversos establecimientos de Vitacura, sobre los riesgos asociados a la conducción irresponsable, especialmente tras consumir alcohol, lo que, en menores de edad, además de riesgoso, está prohibido por ley.
Se trata de lineamientos que el municipio persigue desde el año 2019, a través de la implementación del programa Modelo Islandés, el cual trabaja en la prevención del consumo de sustancias nocivas como bebidas alcohólicas y drogas en alumnos de enseñanza media, a partir de planes de trabajo basados en evidencia y datos locales para fortalecer factores protectores y reducir riesgos relacionados a esta situación en adolescentes.
“Dentro de las principales razones de accidentes sub-30 años, se encuentran la falta de experiencia, inmadurez, exceso de velocidad, uso del teléfono y precisamente la presencia del alcohol. Por eso, junto a Vitacura quisimos generar una propuesta concreta de educación temprana sobre los riesgos de beber y tomar el volante, a través de una activación innovadora y conectada con las nuevas generaciones de conductores”, detalla Juan Pablo Solís de Ovando, presidente de Aprocor.
Al respecto, la alcaldesa de la comuna, Camila Merino señaló que “en Vitacura estamos comprometidos con la prevención a través del Modelo Islandés. En esto estamos juntos la Municipalidad y comunidad educativa de los distintos colegios públicos y privados, que se han plegado a nuestra convocatoria para trabajar por el retraso del consumo en los jóvenes”.