El pasado 22 de mayo se aprobó la Ley N° 21.745, una normativa que marca un hito en la política tributaria de Chile al crear un sistema especial para los vendedores de ferias libres. Esta iniciativa, impulsada por el Ministerio de Hacienda, busca integrar a un sector históricamente excluido del sistema formal, mediante un modelo que simplifica sus obligaciones tributarias y promueve la digitalización.
La ley establece un impuesto del 1,5% sobre las ventas realizadas con medios de pago electrónicos, en lugar del tradicional IVA del 19%. Además, libera a los feriantes de llevar contabilidad formal y presentar declaraciones periódicas. Será ahora responsabilidad de los operadores de medios de pago retener y declarar este impuesto, lo que representa un alivio administrativo para los pequeños comerciantes.
Desde una perspectiva de desarrollo económico e inclusión social, esta medida representa un avance. Formalizar a los vendedores de ferias no solo les permitirá acceder a beneficios sociales y financieros, sino que también fortalece la transparencia y equidad del sistema tributario. Al mismo tiempo, fomenta el uso de tecnología y promueve prácticas comerciales más seguras y modernas.
No obstante, el éxito de esta política dependerá en gran medida de su implementación. Hoy, menos del 20% de los vendedores en ferias utilizan pagos electrónicos, lo que podría limitar el alcance del nuevo sistema. A esto se suman las brechas tecnológicas en distintas zonas del país y las diferencias culturales y operativas entre regiones, factores que no pueden pasarse por alto.
En este contexto, resulta imprescindible que el Estado no solo legisle, sino que también acompañe. Capacitación, apoyo técnico, acceso a tecnología y campañas de información serán claves para que los feriantes puedan adaptarse y beneficiarse realmente del nuevo sistema. Asimismo, se debe resguardar que la formalización no afecte negativamente su acceso a beneficios sociales u otras ayudas estatales.
La Ley N° 21.745 abre una valiosa oportunidad para modernizar y dignificar el comercio en las ferias libres de Chile. Pero como en todo proceso de transformación, su éxito no dependerá solo de la norma escrita, sino de la voluntad política, el acompañamiento institucional y la sensibilidad con que se implementen los cambios en un sector tan diverso como estratégico para el país.