Septiembre no sólo es sinónimo de Fiestas Patrias o primavera. En este mes, históricamente, ha entrado en vigor el horario de verano que rige a Chile (salvo contadas excepciones) desde 1968. Para el presente año este cambio se debía efectuar el sábado 03 de septiembre, pero no será así.
La autoridad modificó la fecha del nuevo régimen horario para establecerlo definitivamente el sábado 10 de septiembre a la medianoche, es decir, se postergó una semana.
“Se establece que a contar de las 24 horas del sábado 10 de septiembre de 2022, y hasta las 24 horas del sábado 1 de abril de 2023, la hora oficial se adelantará en 60 minutos”, versa el comunicado del Ministerio de Interior y Seguridad Pública emitido este martes 09 de agosto.
¿Por qué se postergó esta medida en una semana? Debido a que la modificación horaria se concretaría en la madrugada del 04 de septiembre, día del Plebiscito de Salida en que se debe aprobar o rechazar la propuesta de nueva Constitución para Chile con voto obligatorio.
¿Se adelanta o se atrasa?
El sábado 10 de septiembre a la medianoche deberemos adelantar nuestros relojes en 60 minutos, vale decir, a las 00:00 h ya será la 01:00 h de la madrugada del domingo en casi todo Chile. ¿Por qué “casi”? Porque este cambio de hora rige para todo el país, salvo en la Región de Magallanes y la Antártica Chilena en dónde se mantiene todo tal como está.
Más allá que el 10 de septiembre viviremos la noche más corta del año, hay otra serie de implicancias, no sólo para la rutina diaria, sino que también para nuestro organismo.
Más que un cambio de hora
“Podemos presentar somnolencia, dificultades de concentración, e incluso, problemas cardiovasculares unos días después de la modificación. Esto último ha sido demostrado estadísticamente. No se puede culpar sólo al cambio de hora, pero sí sabemos que las arritmias en la noche, asociadas al ciclo del sueño-vigilia, pueden llegar a ser más frecuentes”, afirma Larisa Fabres Oyarzo, neuróloga de la Clínica Las Condes.
La médico señala que diariamente “las horas de luz y de oscuridad son muy importantes para órganos vitales como: corazón, cerebro o riñón. Estos pequeños cambios pueden afectar a personas con enfermedades preexistentes”.
Eso en el ámbito de la fisiología, pero en qué nos puede afectar psicológicamente. “Podría producir algo de irritabilidad, cansancio, o tal vez, dificultad para concentrarse y una sensación de incomodidad mientras el organismo se ajusta al nuevo horario”, describe la psicóloga, Edith Saa Tapia.
Consejos para el cambio
Con este nuevo horario ganaremos cada día más horas de Sol rumbo al verano. Por eso, una de las recomendaciones de las especialistas es aprovechar esa luminosidad para adaptarnos mejor al cambio.
“Exponerse a la luz solar a diario ayuda al cuerpo a regularse. También sirve el establecer horarios más o menos fijos, por ejemplo, de sueño y comida. Además, ayuda el beber una suficiente cantidad de agua”, enumera Edith Saa, psicóloga de Casa Fen Medicina Integrativa.
“La mejor recomendación es mantener nuestras rutinas como, por ejemplo, la hora de irse a dormir. Además, ayudan el hacer ejercicios por las mañanas y consumir menos cafeína u otros estimulantes”, aconseja la neuróloga de adultos, Larisa Fabres.