Numerosos feligreses llegaron el pasado domingo 14 de agosto al templo parroquial de Ninhue, para celebrar los 60 años de sacerdocio del padre Andrés Lacalle, quien fue ordenado presbítero un día 15 de agosto de 1962. Los presentes provenían de varias comunas de la Región, incluidos también algunos hermanos de Tucapel, que perteneció antiguamente a la Diócesis y donde el padre Andrés sirvió en sus primeros años de sacerdocio. Estuvo presente el obispo Sergio y el padre Tomás, actual párroco de Ninhue.
Al inicio de la Eucaristía, y también luego de la homilía, varios fieles dieron testimonio del ministerio pastoral del padre Andrés y agradecieron su entrega sacerdotal. Destacaron, entre otros aspectos, su perseverancia para llegar a muchos sectores y comunidades, su compromiso con la verdad y la justicia, su cercanía para predicar la Palabra de Dios y mostrar a Cristo. Muchos de los asistentes, ahora adultos, recordaron que habían recibido el anuncio de Cristo cuando jóvenes, por medio del ministerio del padre Andrés, y destacaron también en la acción del sacerdote su creación de Movimientos juveniles, su empeño por construir capillas, y su paso por las diversas Parroquias donde ha servido.
El padre Andrés, por su parte, recorrió algunos momentos y experiencias de su vida sacerdotal y, sobre todo, agradeció el cariño y la acogida que ha recibido de tanta gente a través de los años. Señaló que aunque dejó su patria aun siendo seminarista, siempre acá en Ñuble se ha sentido en casa, en familia.
El lunes 15 de agosto, el padre Andrés celebró la Eucaristía en Cobquecura, donde actualmente vive, para dar gracias a Dios por su sacerdocio al servicio del pueblo de Dios.