Cerca de las 14.35 horas de este viernes, dos patrullas de la Policía de Investigaciones de Chillán, llegaron hasta el acceso de la Municipalidad de San Ignacio y, con la orden emitida por la fiscal Nadia Espinoza, realizaron una serie de incautaciones de computadores y documentación.
Era, específicamente, la Brigada de Delitos Económicos (Bridec) de la policía local, quienes, según publica el la edición electrónica del Diario La Discusión, además detuvieron al alcalde de la comuna, César Figueroa y a otros tres altos directores de los departamentos de Salud, Obras y Finanzas, supuestamente por irregularidades en traspasos de recursos.
En un comunicado escueto emitido por la Fiscalía Regional de Ñuble, el Ministerio Público explicó que “la fiscal Espinoza decretó secreto de la investigación” y que en el procedimiento “hay detenidos que mañana (sábado) pasarán a control de la detención”.
Sin embargo, añadieron que “por existir secreto de la investigación no hay posibilidad de entregar más información”.
El caso causó conmoción en la comunidad, que de inmediato comenzó a realizar consultas a sus concejales.
“Nosotros no estamos enterados de los detalles de esta causa, pero sí es un hecho que puede estar relacionada con el traspaso de unos fondos que se realizaron de manera irregular y que perjudicaban a los profesores en materia de sus previsiones, hecho que nosotros habíamos estado denunciando hace varios meses y de hecho realizamos una presentación a la Contraloría”, explicó el concejal Rodny Baeza.
Su par, Manuel Sandoval, añadió que “respecto a ese tema de los fondos para las previsiones de los profesores, costó que se solucionara pero ahora, hace poco, esos dineros aparecieron, sin embargo se estaba investigando qué ocurrió en el proceso”.
Tercer allanamiento de la PDI
Para los vecinos de San Ignacio la trágica postal no es nueva.
También fue un viernes, pasada las 14 horas, del 11 de enero de 2018 que personal de la Bridec llegó a la municipalidad de San Ignacio, deteniendo al entonces jefe comunal, Osiel Soto, por deudas previsionales con los profesores de la Educación Municipal.
Al lunes siguiente, el alcalde -ya en libertad- le explicó a la comunidad que tuvo que “pagar los platos rotos por las deudas de arrastre de la administración anterior”.
Y esa “administración anterior” estaba encabeza por Wilson Olivares como alcalde, quien también fue detenido por la misma brigada, en febrero de 2013, también un viernes cerca de las 15 horas, y por la misma razón: deudas provisionales impagas que perjudicaban a los profesores.
Se espera que este sábado, al menos, se conozcan las causas de la detención de estos funcionarios.