Más de 6.500 personas se estima repletaron la cancha del Club Deportivo Cerro Negro, entre locales y visitantes de distintos puntos de la región y el país, quienes aprovecharon el fin de semana largo para participar de la cuarta versión del la Fiesta del Chancho de Campo Quillón 2023.
Una mezcla de olores exquisitos dio la bienvenida a los comensales, indicando la gran variedad de platos que estuvieron a disposición del público, que a su vez pudo disfrutar de exquisiteces como perniles, prietas, costillares, carne al jugo y chicharrones, entre otras delicias culinarias.
«Estamos gustosos de poder colaborar como municipio con nuestra Junta de Vecinos del Sifón, que preside la señora Alicia Anabalón y su directiva. Ha sido una fiesta muy exitosa, mucha gente nos acompañó de distintos lugares y con eso también son muchas las personas que se ven beneficiadas, ya que como municipalidad estamos trabajando en reactivar la economía. Tenemos muchos comerciantes y artesanos que expusieron sus productos ante la gran cantidad de público que nos visitó este año. Estamos muy contentos de que todo haya sido un éxito y de ver que la senda que seguimos, para recuperar la actividad económica de nuestra comuna, es la correcta», indicó el alcalde Miguel Peña.
Todo se duplicó este año, en relación a la edición anterior. En seis parrillas se cocinaron los costillares, que llamaron la atención de algunos asistentes que se allegaron a las brasas, tanto para disfrutar de su hechura como de su sabor.
«Empezamos a trabajar a las cinco de la mañana, somos más de 50 personas que nos hacemos cargo de organizar la fiesta. Este año duplicamos los platos, sacamos más de 10 mil a la venta, entre prietas, costillares, perniles y chicharrones, todos con agregado y ensalada», explicó Jessica Concha, jefa de cocina de la fiesta.
Cerca de 40 stands rodearon el recinto fiestero de más de 800 metros cuadrados, tanto en su interior como exterior, con muestra y venta de diversos productos de factura local, como cosméticos, miel, vinos y licores; además de artesanías en greda, madera y mimbre. Para los regodeones, se pusieron a disposición completos, empanadas, anticuchos, papas fritas y otros productos de la pastelería criolla.
«Con mi esposo somos los dos solitos y aprovechamos de salir a todas las fiestas costumbristas que hay, sobre todo acá en Quillón. Disfrutamos mucho cuando venimos, porque la comida es exquisita y hay de todo para disfrutar», señaló Débora Elgueta, visitante de Coronel. Por su parte Marcela Correa, oriunda de Rancagua, aprovechó el fin de semana largo para visitar la comuna- balneario, junto a su grupo de mujeres adultas mayores. «Hemos aprovechado de conocer Quillón, visitar algunos lugares y probar sus buenos vinos, lo que nos atrajo para acá. De la fiesta del chancho supimos por casualidad y aprovechamos de venir y disfrutar de la buena comida, la música folclórica y todo lo que tienen para ofrecer».
Conjuntos folclóricos marcaron los compases durante el día, haciendo bailar a los amantes de las cuecas. Por la tarde- noche, bandas rancheras se encargaron de hacer bailar a los asistentes, hasta altas horas de la madrugada.
Para los niños también hubo diversión, con juegos inflables, taca- tacas y otros entretenimientos de destreza.
Sin duda, la Fiesta del Chancho de Campo de Quillón se ha vuelto una de las preferidas del público, haciendo más auspiciosa la celebración, ya que implica un gran aporte a la recuperación económica de la comuna- balneario.