En el marco del plan Calles Protegidas y reforzamiento de las fiscalizaciones ante el aumento de viajes por Fiestas Patrias, a través del Programa Nacional de Fiscalización de transportes, realizó un procedimiento de fiscalización en el terminal María Teresa de Chillán, debido a la nueva normativa, ya vigente, que obliga a las empresas de servicios interurbanos de transporte público de pasajeros a entregar un comprobante por cada bulto o equipaje transportado con el nombre de la persona que viaja y su número de asiento.
Esta nueva medida implica que en los viajes de menos de cinco horas, las empresas de buses interurbanos deben entregar un comprobante por cada bulto o maleta, identificando en el mismo ticket el nombre del pasajero y el número de asiento. En tanto, en los traslados de más de cinco horas, deben otorgar un comprobante por cada bulto o maleta, identificando el nombre del pasajero y el número de asiento, y contar con una nómina de pasajeros que incluya el número de ticket de cada bulto. Esta nómina de pasajeros debe quedar disponible por parte de las empresas durante 180 días para eventuales investigaciones del Ministerio Público.
Esta disposición asegura que cada bulto, equipaje o valija transportado esté correctamente documentado, registrado y vinculado al pasajero responsable de los mismos. Asimismo, permite mantener la obligación de la nómina de pasajeros en viajes de más de cinco horas de recorrido, incorporando la información del comprobante en la referida nómina.
El seremi de Transportes y telecomunicaciones, Javier Isla Figueroa, afirmó que “en el marco de la fiscalizaciones constantes que realizan el a distintos terminales, el día de hoy se realizó una fiscalización en el terminal María Teresa, en el marco de nuestro programa unidos por un 18 seguro, que busca tener mejores estándares de seguridad debido a la fiesta que se aproxima y que todos esperamos que se puedan llevar a cabo de buena manera”.
Isla agregó además que “en este operativo además se fiscalizó la nueva normativa que establece que los bultos que van en los portaequipaje de los buses deben ir asociados a la persona que los ingresos, de esta manera cada bulto va con el número de asiento de la persona, de esta forma mantener mejores estándares de seguridad para llevar una trazabilidad y mantener mayor niveles de seguridad con respecto a lo que llevan o no llevan estos equipajes”.
Las fiscalizaciones de esta normativa están a cargo de inspectores del Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones, inspectores municipales y Carabineros. En el caso de que las empresas no cumplan, se abrirá un proceso administrativo sancionatorio que puede culminar en una amonestación por escrito, suspensión o cancelación del servicio o del vehículo. También se exponen a multas entre 0,5 a 1 UTM.