La Región de Ñuble finaliza el 2024 con un preocupante incremento en los incendios forestales.
Según informó el director regional de Conaf, Juan Salvador Ramírez, hasta el 30 de diciembre se han registrado 136 incendios, un 58% más que los 86 reportados durante el mismo periodo de 2023.
Este aumento evidencia la necesidad de reforzar las medidas preventivas y el compromiso ciudadano frente a una problemática que afecta tanto al medio ambiente como a las comunidades.
El impacto de estos incendios no se limita al número de eventos, sino también a las hectáreas destruidas.
Durante 2024, el fuego ha arrasado con 1.212 hectáreas, lo que representa un aumento de más del 500% en comparación con las 200 hectáreas afectadas el año anterior.
Por provincias, Diguillín lidera con 60 incendios, seguida de Punilla con 49 y Itata con 27.
Entre los casos más recientes, destaca un incendio en Trehuaco, donde una persona que trabajaba con herramientas provocó chispas que iniciaron un fuego, afectando más de dos hectáreas.
Otro incidente significativo ocurrió en la Ruta 5, en Chillán, donde un transeúnte lanzó una colilla de cigarro que desató un incendio. Lo mismo en el sector Vegas Verdes de Quirihue, donde afortunadamente la rápida acción de vecinos evitó algo mayor.
“Estas acciones son reiterativas y nos tienen preocupados”, señaló Ramírez, quien hizo un llamado enfático a la precaución y a tomar conciencia, especialmente en esta temporada de mayor riesgo.
Solo entre el viernes y el domingo pasado, Ñuble registró 14 incendios forestales, activando a bomberos, carabineros y equipos privados para combatir las emergencias.
Desde Conaf insisten en que la mayoría de los incendios pueden evitarse mediante conductas responsables.